¿Cómo estimular la memoria sin que parezca un ejercicio?

Jugar, recordar, reírse: claves para activar sin exigir

SABERES ACTUALESGERIÁTRICOS Y RESIDENCIASFAMILIASPERSONAS MAYORES AUTOGESTIVASRECOMENDACIONES

Por Lic. Miriam R. Garbatzky

5/13/20252 min leer

Ancianos charlando y riendo
Ancianos charlando y riendo

A nadie le gusta que lo evalúen.
Menos si ya pasamos los 70, si nos duele un poco la espalda y si venimos escuchando la palabra “ejercicio” como sinónimo de “tarea obligatoria”.

Por eso, estimular la memoria no puede ser como llenar planillas ni completar fichas. La memoria se activa mejor cuando no se siente vigilada. Cuando se ríe. Cuando se conversa. Cuando se juega.

🧠 ¿Qué significa “estimular” en serio?

Estimular no es entrenar como si fuésemos un músculo. Tampoco es repetir 100 veces la lista del súper. Estimular es generar circuitos nuevos, puentes entre lo afectivo y lo racional, y permitir que el cerebro, aún en la vejez, siga haciendo lo que mejor sabe hacer: conectar.

Lo vimos en Rosario, en Córdoba, en Buenos Aires y en muchos geriátricos del país: cuando aparece el juego, aparece también el deseo de participar. Y donde hay deseo, hay memoria.


🎲 La clave está en el cómo

No se trata de decir: “Vamos a hacer un ejercicio para reforzar la memoria de trabajo”.
Se trata de decir: “¿Te acordás cómo se jugaba al Tutti Frutti?”.
O: “¿Querés que juguemos a completar refranes?”
O mejor: “¿Te animás a inventar una historia con estas tres palabras disparatadas?”

Las personas mayores no necesitan que les hablen como a niños. Necesitan que les propongamos desafíos con respeto, con humor y con contexto.


📦 Lo que se puede usar

  • Refranes para completar y reinventar

  • Cartas con imágenes para contar historias

  • Listas temáticas (“cosas que empiecen con P”, “comidas de tu infancia”)

  • Canciones para recordar letras

  • Fotos viejas para evocar

  • Cuentos inventados con palabras absurdas

Todo eso, en papel, sin tecnología, sin grandes recursos. Porque no hace falta tener WiFi. Hace falta tener ganas.


⚠️ Lo que hay que evitar

  • Los ejercicios que infantilizan (“encuentre las diferencias” como castigo disfrazado)

  • Las actividades que frustran (niveles de dificultad sin adaptar)

  • Las preguntas tipo “test” que hacen sentir en examen

Las comparaciones entre participantes (“mirá cómo él sí se acordó...”)

La memoria no mejora cuando se siente juzgada. Mejora cuando se siente acompañada.


💬 Una frase que vale más que mil ejercicios

“Cuando alguien se ríe mientras recuerda, ese recuerdo queda mejor guardado.”


🎁 ¿Querés propuestas que hagan reír, jugar y recordar en serio?

Te invito a descargar nuestro cuadernillo de actividades familiares:
🎲 Juegos para activar la memoria sin que se note.
🧠 Refranes, cuentos absurdos, historias compartidas.
❤️ Y sobre todo: ganas de disfrutar.

👉 Todo gratis, en www.mnemos.com.ar/recursos-gratuitos